26 de mayo de 2008

Entrevista a Sentandreu: El 2011 una ilusion Posible

El 2011 es un reto posible e ilusionante, en el que cabe todo el valencianismo"


Baltasar Bueno (Vh).- Juan García Sentandreu es abogado, empresario y cursó sus estudios de Doctorado en Ciencia Politica y Derecho Constitucional. Es empresario vinculado al empleo social y fue en el 2006 Premio Nacional de Integración Laboral de personas con discapacidad entregado por la Junta de Castilla La Mancha. Ha escrito siete libros, uno de ellos, “Breu Historia de la Llengua Valenciana”, del que se ha editado 50.000 ejemplares.

Vd, recientemente, ha recordado el discurso fundacional de Coalició Valenciana como la formulación de un “foralismo constitucional”. ¿Qué significado tienen estos conceptos a día de hoy?

Coalició Valenciana alzó la bandera de la foralidad como estandarte de la defensa de nuestros intereses y como reivindicación permanente de nuestros signos de identidad. Pero se formuló desde un planteamiento totalmente racionalista con el fin de que el identitarismo no se confunda con un esencialismo sin base legal que nos pudiera conducir a defender un nacionalismo desordenado y sin respuesta social.

¿El foralismo tiene más que ver con el nacionalismo o con el constitucionalismo?

La foralidad constitucional no es sólo un punto de encuentro con nuestra realidad histórica y política, tiene una base jurídica en la propia disposición adicional segunda de la Constitución, pero es, a mayor abundamiento, la fórmula más genuina en la que nos podemos encontrar todos los valencianistas de cualquier sensibilidad. La presencia del blasquismo republicano en Coalició Valenciana a través de su estructura política y del Ateneo Blasco Ibáñez es un ejemplo de ello.

¿Cómo valoran sus primeros resultados electorales?

Discretos y lógicos. Fue el primer contacto que tuvimos con el votante a los 2 años de nuestro nacimiento. Fuimos capaces de presentar 140 candidaturas con 23.000 votos directos que nos han dado 23 concejales y una alcaldía. En política los tiempos se miden por legislaturas, nosotros no hemos cumplido ni la primera, mientras que otros ya no están o no se sabe de ellos después de seis. Hoy, la estructura de Coalició Valenciana se ha ido fortaleciendo, pues nuestro objetivo en el 2011 es superar las 200 candidaturas locales.

Se ha referido Vd. a “otros”. ¿La unidad del valencianismo es posible?

El discurso de la división del valencianismo es propio del PP, que es a quien beneficia. Valéncia hui fue testigo directo de una oferta mía sin condiciones a una unión con Unio Valenciana. La respuesta fue no, porque no. UV ha renunciado, incluso a presentarse a estas generales, habiéndolo hecho en el 2003 con un Jose Maria Chiquillo en las listas del PP. La unidad del valencianismo la va haciendo el pueblo, como la hizo con el centro derecha cuando el electorado liquidó la UCD en beneficio del PP.

Pero ya no es sólo Unio Valenciana. Hay sectores valencianistas incluso en el PP y entidades sociales relevantes que hoy disienten de la política cultural del PP de Camps…

Es cierto. Pero la política cultural de Camps, no nos engañemos, es la misma hoy que hace 12 años cuando el PP pactó la AVL con Cataluña.

Fue un proceso que nosotros denunciamos desde la manifestación que convocó la Coordinadora el 13 de junio de 1997, siendo yo su Secretario General, se cumple ahora 11 años. Ya advertimos que el pacto de la lengua era una trampa precisamente para los valencianistas en la que cayeron muchos de ellos aceptando prebendas, cargos, premios y subvenciones. Al final, el catalán es oficial en nuestra Comunidad desde el 9 de febrero de 2005.

¿No cree que muchos valencianistas obraron de buena fe?

No se si muchos o pocos. Hoy ya me da igual el número. Lo importante es que de cara a las elecciones autonómicas del 2011 y del reto que ello constituye para el valencianismo, aquí no sobra nadie. Menos aún en una situación de duopolio o bipartidismo atroz, protegido por una ilegal barrera electoral que el PP y el PSOE han pactado en el 5%.

Creo en el encuentro y comunión de todo el valencianismo; el social, el cultural y el político, y entidades como el GAV y Lo Rat Penat, Escritors en Llengua Valenciana, Dones Valencianes, Aparisi i Guijarro, la Fundacio Nou Valencianisme, la Cardona Vives, debemos de hacer un frente común, junto con la Real Academia y liderar un gran movimiento valencianista que dé apoyo a una oferta política sólida entorno a Coalicio Valenciana y a cualquier otra fuerza que se quiera sumar para sumar.

Su partido recientemente lideró en el seno de la Coordinadora d´Entitats un Manifiesto público, que nuestro periódico reprodujo, en el que se hacía una llamada a la movilización con el fin de detener los efectos perversos de la AVL ¿Hay a la vista movilizaciones como la que Vd. lideró en el 97 y en el 2004?

Por supuesto. La movilización ha sido la gran arma del valencianismo. Pero no es fácil. Es más, ya le digo, una manifestación requiere una serie de implicaciones y recursos humanos y económicos muy importantes, pero sobre todo un reactivo con un gran impacto mediático que haga que la sociedad la pida a gritos. Hoy hay motivo má que suficiente para ello, pero el muro mediático hace que el pueblo valenciano no sea verdaderamente consciente de la gravedad de la situación. Es cuestión de empezar y de esperar. Pero haberla la habrá.

En su conferencia de la semana pasada Vd. analizaba la crisis del PP y argumentaba que ello iba a favorecer las expectativas de su partido?

Es cierto. Todas las encuestas arrojan una aceptación social de Coalició Valenciana 20 veces superior a la intención de voto. Esto lo sabe bien el PP y por ello se envuelven en la bandera del valencianismo siempre a última hora como argumento recurrente. Por ello, llenamos la Plaza de Toros, nuestras fiestas del partido son multitudinarias en el río y nuestras manifestaciones las mayores de cuantas se convoca. Pero el voto del miedo hace que el PP tenga secuestrado al votante valencianista con mentiras y manipulaciones. Pero ahora le ha llegado la hora de la crisis al PP y ello hará que muchos votos prestados de origen valencianista vuelvan al partido de referencia.

¿Será en el 2011, 2012 o más tarde?

En el 2011. El PP pasará ahora su congreso con una ejecutiva de consenso entre liberales y socialdemócratas y con un Gallardón con poderes ejecutivos de los que hará uso cuando el PP se estrelle definitivamente en las elecciones catalanas y vascas. Será el ocaso de Rajoy y la hora de Gallardón. Y la del sector liberal que no permitirá una desvalorización ideológica del partido. Una guerra servida que llegará hasta las mismas puertas de las elecciones del 2011. Ello nos beneficiará a nosotros más que a Rosa Díez, ya que su discurso estatalista no será propio de unas elecciones en clave autonómica y local y menos aún si no llega a contar con estructura para ello, que sí tiene Coalició Valenciana.

Para finalizar. ¿Qué representa hoy Coalició Valenciana?

La tenacidad, la dignidad e integridad ideológica y política. Somos los portadores del discurso valencianista de los 80, el que ganó la Batalla de Valencia. El que no se ha doblegado ni a pactos ni a componendas. El que está por encima de la oportunidad, el poder y la ambición ilegítima. Un partido con una base ideológica enraizada en la historia, tradiciones, cultura e identidad valenciana que defiende sin complejos los intereses sociales, culturales, económicos y morales de la sociedad valenciana. Una casa que pretende ser de encuentro de todo el valencianismo. Construida para la unidad de la diversidad. Creo que somos la gran esperanza de muchos valencianos.



Más información en la edición impresa de Valéncia hui.