3 de enero de 2010

Hosteleros de primera, restauradores en paro y cafés a precio ZP

Coalición Valenciana debe denunciar nuevamente la desfachatez de los supuestos representantes de los valencianos. Sus señorías los congresistas no conocen la crisis, ni parece ser otra cosa… Además de boyantes sueldos, coches gratis, e infinidad de servicios a cargo de las arcas públicas, cuando quieran comer o tomar un cafenet en Les Corts, lo harán a precios de antes del Euro en el mejor de los casos.

Vergonzante es la actitud de sus señorías, que con jugosos sueldos y pensiones futuras y seguras, no dudan en vampirizar a los ciudadanos consiguiendo precios de risa para sus caprichos gastronómicos. Y decimos vampirizar, no ya por el ridículo precio que van a pagar, sinó más bien por la jugosa subvención que recibirá la adjudicataria para no perder dinero con la concesión, una concesión a la que nadie le obliga a acudir.

Bocadillo de lomo a 1,50, tapa de bravas a un euro, café a 0,80 y menú a 6 euros, perfecto, buena gestión la del responsable que ha conseguido esos precios, ¿pero son reales? “La nueva licitación mantiene la subvención de 55.200 euros anuales (4.600 al mes) para el bar-comedor y de 36.000 euros (3.000 mensuales) para el restaurante. En total, 91.200. Además, para incentivar la calidad, cada menú por encima 60 en la cafetería se primará con 1,5 euros y en el restaurante, los que pasen de 40, con 3 euros, hasta agotar el tope de los 100.000 euros anuales.” Es decir que para que sus señorías no tengan que rascarse el bolsillo, los valencianos debemos abonar hasta 100.000 euros anuales.

Mientras, en la playa, unos empresarios que se hacen responsables de sus negocios y unos clientes que abonan sus gastos a precio de mercado, son privados unos de poder ejercer su actividad y otros de comer donde les plazca. ¿Qué empresario de hostelería de Pinedo, El Saler o la Malvarrosa no estaría a gusto con los 100.000 euros de pública subvención?
¿Han perdido el juicio nuestros representantes? Subvencionan sus vicios en actividades que no son rentables, y condenan al paro a 200 familias.

Coalición Valenciana exige una regeneración democrática de nuestra política y que los representantes vuelvan a ser conscientes que su actividad es un servicio a la sociedad, no un privilegio con derechos feudales donde van a vivir 4 años del sudor de los ciudadanos.

Coalición Valenciana exige la dimisión del los responsables del cierre de los restaurantes de las playas valencianas, que tanto bien hacen a la economía de nuestra Comunidad y, de la Presidenta de las Cortes por no cerrar un restaurante que el PP nunca debió construir.

Coalición Valenciana exige un poco de respeto a los ciudadanos que tan mal lo están pasando en estos tiempos difíciles y que no se despilfarre el dinero de sus impuestos.